Cristina Mª

Soy escritora, cineasta y periodista. Vivo en Madrid (España), pero guardo en mis venas la conexión con mi bisabuela Teo, indígena de Ucayali (Perú), que según me contaron mis ancestros, conoció a los Shuar y estos le regalaron las reducidas cabezas de un príncipe y una princesa Inca…

Me apasionan los paisajes, las noches que retumban de silencios, las  vidas secretas…Me gusta respirar los rastros de reinos lejanos, el agitado olor de las orquídeas y bromelias, sentir el latido de la piedra en mis dedos, recorrer parques naturales, empaparme de lluvia, sentir el oleaje en mis pies, dialogar con los volcanes…

Comprender y honrar a los indígenas de todas las tierras, sus costumbres, rituales, danzas. Ellos son custodios de antiguas sabidurías. 

Abrazar la vida como si solo existiera instante por instante en mis viajes ese pellizco de mundo y entero pudiera custodiarlo en mi alma,  acunarlo para siempre entre mis tesoros. 

Después de cada jornada, desbordarme feliz en mi diario. Palabra por palabra, latido a latido. Selvas, océanos, plantas, animales, antiguas civilizaciones, rastros de lo que fue, es y será. El pulso de la vida en todo lo que se ve y en lo que, invisible a los ojos, solo se alcanza con el alma y siempre junto a mi pareja, Gerson A. Sousa, coreógrafo y bailarín, con una mirada que embellece todo lo que crea.

Eso es lo que me late...

En mi parte más profesional, colaboro con varias revistas de investigación e historia del grupo MC Ediciones desde hace más de 10 años. También he impartido un taller de escritura  creativa para niños, y soy autora de relatos breves como "Álbum de cuentos", (1995); "Palabras para plantar primaveras", (2005);  "Las mejores historias de amor o cómo rompimos la muerte a besos", (2012), "Diario de una artista", (2013) con ilustraciones de personas de la Fundación Dalma con daño cerebral.

Mi primera novela corta juvenil la publiqué en 2013 con Dairea Ediciones: "El Alma de la Armonía", sobre el gran compositor Antonio Lucio Vivaldi (Ahora en 2ª edición); también soy autora de los cuentos infantiles ilustrados "Peditos, pedetes y pedotes", (2013) (reeditado en versión bilingüe español-inglés con ilustraciones de Rut Villamagna, pintora de la escenografía de Tim Burton, Guillermo del Toro, J.J. Abrams, etc) y el cuento infantil ilustrado "¿Te cuento un secreto?", (2014). En 2014 y 2015 publiqué respectivamente la novela  "Palabras de lluvia", elegida en el New Spanish Book de Reino Unido (2018) y en el Book of Spain (2020) que pronto entrará en 3ª Edición y la novela "Diosas del silencio" publicada en 2015 por Dairea Ediciones. 

En 2017,Eirene Editorial publicó  "El señor de las especias y otros relatos", libro en el que participo junto a varios autores con dos relatos "Sananamay. El Aliento de la vida" y "El huerto de las palabras". En 2018, Eirene Editorial publicó mi novela: "El vendedor de abanicos", una historia sobre mujeres y abanicos que incluye el "Lenguaje de las sirenas", un idioma sagrado de las que fueron guardianas en el principio de los tiempos. En ese mismo año mi relato "A ciegas" recibió el Primer premio de Relato erótico  en el certamen Fantasea con las palabras celebrado en San Sebastián de los Reyes de Madrid. 

En breve, Dairea ediciones publicará una novela juvenil gótica ilustrada: "ILA en el País de las Arañas"

Actualmente con el estreno de mi documental "Lo visible y lo invisible. La Sinagoga del Agua" sobre un lugar mágico, del cual soy guionista y directora, y de un cortometraje anexo sobre mujeres judías medievales "DESDE EL SILENCIO", que ha sido proyectado en diferentes centros culturales de Madrid y Úbeda, premiado en el Festival Cencor de Madrid y seleccionado en el Festimage de Calella. También estoy escribiendo mi última novela juvenil-adulta y otra novela, continuación de Diosas del silencio.

Al futuro solo le pido la misma ilusión con la que he afrontado mi vida hasta ahora, a pesar del dolor, de los obstáculos, a pesar del miedo...Quiero seguir siempre hacia adelante, esa es mi única rosa de los vientos. Mi padre, que está en lo invisible me ayuda, al igual que otras personas queridas que me dejaron hace tiempo. 

En mi vida profesional quiero aprender a mantener mi luz, a pesar de que haya muchas personas que quieran apagarla. Todos tenemos nuestra propia luz y nada ni nadie tiene el derecho de opacarla. Doy gracias por todos mis amigos, que son también mi impulso, y sobre todo a Gerson que siempre me abraza y apoya en los momentos difíciles.